En operaciones que ocurren en relación con la existencia de circuitos lógicos, es posible crear elementos de escritura digital como las puertas mencionadas anteriormente u otras. En este título se incluirían códecs, microprocesadores, memoria y demultiplexores, por citar algunos de los elementos que componen su apariencia en este caso. Todos estos son relevantes, ya que la electrónica digital continúa siendo uno de los elementos esenciales en la electrónica moderna para alimentar y operar varios procesos. Cada circuito que encontramos al mismo tiempo se divide en circuitos más simples que funcionan razonablemente bien para mantener la regularidad. La forma en que esto se traduce en un buen rendimiento técnico queda clara cuando vemos que el circuito lógico que transmite alfabetos binarios y ceros se ha utilizado en lenguaje de máquina. Durante la transmisión de esta información, se forman circuitos complejos, fundamentales en las operaciones digitales, tanto en los modos más avanzados como en los más simples. Una de las características que debemos tener en cuenta es que el circuito lógico no necesita ser representado de manera uniforme y universal. Hay varias formas de que esto suceda donde los operadores reemplazan los operadores y los ceros mostrados por la información binaria cargada en un componente numérico. Por ejemplo, lo podemos ver con el equilibrio que existe entre la función de encendido y apagado o donde simplemente utiliza un interruptor abierto o cerrado en relación a la transmisión de energía. Así, dependiendo de la posición en que se utilice el convertidor, el dispositivo digital puede funcionar o no sin modificar significativamente su funcionamiento interno. La tabla de verdad se utiliza para calcular y gestionar estas variables.